martes, 23 de febrero de 2010

Leyéndote





El mundo es un libro,
cada vida una página.
Y tus ojos una historia
escrita en la retina.

Me leo a las personas
hasta la última coma,
hasta el último punto,
hasta sacarle las cosquillas.

Y de párrafo a párrafo
descubro que tú, igual que vos,
eres narrador de vocación.  
Y yo, otro personaje de ficción.

(Paso página)